me aproximé a la pupa
incrustada sobre la corteza de un árbol
y escarbé en ella
con la fuerza de la uña de mi dedo
impregnándome de insecto
más arriba de mis ojos
apuntando hacia el cielo
sentí el asco terrible y el ansia arcaica
del artífice
de su propio exterminio
Un paraíso de orines (Agita Vallekas, 2019) Gsús Bonilla
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